Noche de Cadáveres...

CADAVER GRUPO 1

CADAVER DE AILU SOBRE EL HAIKU DE NOE (Convertido en Tarea Vampirezca)

 CADAVER GRUPO 3

CADAVER GRUPO 4

CADAVER GRUPO 2

Haiku - Recuerdo

Quince de junio

Susurros en el viento

Su voz me habla

 

Este es el mes

Del final del otoño

Hojas naranjas

 

Su recuerdo es

Música en mi alma

Risas y calma

 

Aquí presente

Esta mente piensa

Ella extraña

 

Solo un momento

Hoy pasa rápido

La vida vuela

 

Días lejanos

Esos instantes lindos 

Todo llega

es mitad de año y a mi cara la inunda la voz del viento

mientras se acerca el frío, vuelan las últimas hojas naranjas

recuerdo una calma y se apacigua mi alma

extrañando intensamente lo que se ha alejado del presente

veo como este momento se une al viento de la vida

el instante se aleja mientras llega otro día

ella vive atada a ese instante

si no hay tiempo, nada hay que se pierda

ya no veo su semblante

y esos ojos brillantes

se han hundido en locura y tristeza

-

ese día de hojas naranjas

que su mente sigue reviviendo

en su lecho dejaba

aquel que más amaba

desahuciado, su último aliento

-

Oyó el viento que él dijo su nombre

y que incluso sostuvo su mano

pero el cansancio era grande

el mundo debió pesarle

mucho más que ese tenue llamado

-

Al despertar, le pidió disculpas

ella prometió estar siempre a su lado

pero ahí estaba, sola

con sus lágrimas vanas

castigándose por haberlo dejado

.

Y su corazón lo detuvo todo

aunque en su mente pasen los días

pues prefiere acompañarlo

en un mundo imaginario

que vivir sola aquella agonía

No sabe cómo hizo para sobrellevar ese dolor. Porque ya no hay hojas naranjas ni manos calientes que contengan el huracán, aquel que se desata en forma de improperios y lágrimas luego de una semana con más obligaciones que deseos. Ya no está el viento que solía revolver sus cabellos entrelazados por la pasión mientras agitaba los abrigos color ocre con olor a leña. Pensó que las ausencias duelen hasta que el espacio se llena con otras imágenes, otros olores, nuevas personas y sensaciones que actúan como el hilo unido a la aguja. El hilo pasa de un lado a otro uniendo los bordes de la tela rota, buscando enmendar lo que ya no es. No queda igual, nunca queda como solía ser. Pero la prenda puede seguir cumpliendo su función por varios años más. Para juntar estos extremos irregulares que se abrían como herida recién formada decidió que no había ningún apuro y que se tomaría su tiempo para empezar a enhebrar la aguja.