tocó las teclas
sentado en el banco
seguras las cajas
bajo grandes plegados
leía las notas
sin mucho cuidado
Armonizaban todos
sin sonar bajo
parlantes armados
y aire aplastado
felices los pocos
en muy buen estado
fumaba demasaido
esperaba respuesta
excesivo el ansiado
por la ilustre pintura
con el teclado cercano
ahí abrazó la coyuntura
veía a la multitud
extasiada estaba
caía en su plenitud
y el teclado tocaba
se acercaba un fuerte alud
que su mente calmaba
mucho había tomado
el vino fuerte temblaba
pastillas había tragado
el tecladista se asustaba
del mundo se había exiliado
mientras el monstruo lo miraba
y entero el desangraba
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Vera
Caro
Laura
Diana
Salvador
Cristian
Sofía
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